La importancia de ligar la formación académica con la realidad empresarial
La pandemia ha sido un acontecimiento mundial que nos ha venido a todos de golpe y que nos ha afectado drásticamente tanto en lo personal como en lo profesional. El sector de los eventos ha sido uno de los más afectados, parando una industria que vive de las conexiones y experiencias en vivo en su gran mayoría, y que de la noche a la mañana nos vimos todos los profesionales en nuestras casas sin poder trabajar por muchas ganas que tuviésemos.
Nos tocó reinventarnos en tiempo récord para poder salvar el sector de una muerte segura, primero tuvimos que cancelar o postponer las fechas de celebración, y después cambiar a un formato online, para después según las circunstancias en cuanto a las medidas restrictivas iban permitiéndolo pasar a un formato híbrido.
Estos acontecimientos demuestran la importancia de la formación y más en un sector en constante evolución como el de los eventos y el entretenimiento, y más con un modelo educativo basado en el Learning by doing como es el que tenemos en la Universidad Nebrija. No es suficiente con aprender, hay que aplicar todos los conocimientos de manera práctica, y hay que hacer unas horas obligatorias de prácticas en empresa para poder obtener el título oficial.
Hay que entender la formación en organización de eventos desde la parte estratégica donde hay dos aspectos que tienen mucha importancia, además de los puros relacionados con la propia planificación, producción y ejecución del evento, como son la creatividad y la comunicación. La creatividad porque es lo que nos va a permitir en la mayoría de los casos tener una ventaja competitiva frente a nuestros competidores y tener una propuesta de valor diferencial. Y la comunicación entendiéndola desde dos perspectivas, primero tenemos que entender el evento como herramienta de comunicación y que nos permite poder cumplir con los objetivos establecidos previamente y segundo la propia comunicación del evento, más en un entorno tan cambiante como el actual, donde la audiencia esta más fragmentada que nunca.
Una propuesta de valor en cuanto a formación es clave, va a permitir que los egresados se incorporen al mundo laboral con las mejores competencias y capacidades para cubrir la demanda actual, lo que en el medio largo plazo ayuda a profesionalizar el sector, lo cual afecta directamente en la cuenta de resultados.