

La importancia de profesionalizar el sector MICE
“Profesionalizar significa marcar unos estándares de calidad, asegurarse de que los equipos estén bien formados y fomentar una colaboración real entre lo público y lo privado”
El sector MICE es uno de los motores más potentes para el desarrollo económico y la proyección, tanto a nivel nacional como internacional, de los destinos. Va mucho más allá del turismo: tiene que ver con conocimiento, innovación, negocio y reputación. Pero para que ese potencial realmente se note y tenga un efecto duradero, es fundamental profesionalizar el sector.
Profesionalizar significa marcar unos estándares de calidad, asegurarse de que los equipos estén bien formados y fomentar una colaboración real entre lo público y lo privado. También implica entender que organizar un evento profesional no es lo mismo que preparar una comida entre amigos: se necesita estrategia, conocimiento técnico, sensibilidad cultural, manejo de herramientas digitales y, sobre todo, una visión global del negocio.
Uno de los grandes desafíos del sector MICE es la falta de unidad. A menudo, los eventos se organizan de forma improvisada o con equipos poco especializados, lo que afecta la experiencia de los asistentes y la imagen del destino. En este sentido, la profesionalización es clave: mejora la calidad, hace que seamos más competitivos y garantiza que cada evento —sea un congreso, una convención o un incentivo— se convierta en una oportunidad real de crecimiento económico y social.
En esta línea, ciudades como Córdoba están dando pasos firmes para posicionarse como referentes del sector MICE a través de una apuesta decidida por la profesionalización. Desde el Ayuntamiento, y de forma más específica a través del Instituto Municipal de Turismo (IMTUR), se están impulsando programas de formación especializada, encuentros con profesionales del sector y una estrategia clara de atracción de eventos con valor añadido. Esta visión de largo plazo no solo mejora la capacidad operativa del destino, sino que también fortalece su imagen como ciudad preparada para acoger eventos de alto nivel.
Las agencias de eventos tienen un papel central en este proceso. Son quienes hacen posible que las ideas se transformen en experiencias. Pero para que puedan hacerlo bien, necesitan contar con respaldo institucional, normativas claras y formación especializada. Apostar por su profesionalización es, en definitiva, apostar por el futuro del sector.
Además, la digitalización ha traído nuevos retos. Hoy en día, los eventos híbridos, la medición de impacto, el cuidado del medioambiente o la ciberseguridad requieren habilidades específicas. Profesionalizar el MICE también significa incorporar estas cuestiones de manera responsable y con criterio. Córdoba, consciente de esta transformación, está incorporando estos elementos en sus acciones promocionales y formativas, alineando su oferta con las nuevas exigencias del mercado global.
Por último, hay un aspecto estratégico que no podemos olvidar: el MICE es una herramienta poderosa para atraer talento, inversión y visibilidad internacional. Pero para que funcione, es necesario contar con estructuras profesionales que entiendan el mercado global y construyan experiencias memorables con resultados medibles.
En resumen, profesionalizar el sector MICE no es algo opcional. Es la base para convertirlo en un pilar del desarrollo económico, social y reputacional de los destinos. La excelencia no aparece sola: se consigue con formación, método y una visión clara de futuro. Córdoba ha entendido este mensaje, y con el impulso del IMTUR, está construyendo un modelo de ciudad que mira al futuro de los eventos con ambición y criterio.
