Un buen envase constituye una herramienta de marketing de primer orden. Dos de cada tres consumidores se deciden a comprar un producto nuevo cuando el packaging llama su atención.
De hecho, son nada más que seis segundos los que tiene un producto para hacerse notar en el lineal e incitar a que el consumidor lo incorpore a su cesta de la compra, por lo que un buen diseño es clave para entrar en los hogares. Y no solo entrar, sino también quedarse. De hecho, a un 41% el packaging le influye a la hora de repetir la compra de un producto, según datos de Nielsen…